Categoría: Enfermedades
Escrito el día 24-julio-2016 por Juan Toral
Con el verano se disparan las actividades acuáticas donde en busca de un buen chapuzón intentamos buscar el agua y la humedad ya sea en forma de piscinas municipales, baños público…Son días de andar descalzos para intentar contrarrestar el calor pero también son días propensos a la aparición del papiloma plantar, también conocido como verruga o papilomatosis plantar.
¿QUÉ ES UN PAPILOMA PLANTAR?
Es una pequeña lesión que aparece en la planta del pie con aspecto superficial y rugoso que suelen dar dolor y pueden aparecer solas o agrupadas.
Dicho de manera más técnica, una verruga es una lesión benigna de la epidermis que se manifiesta en forma de excrecencia rugosa en forma de pequeña lesión hiperqueratósica y circunscrita que suele aparecer como un anillo córneo blanquecino a su alrededor.
¿POR QUÉ SE PRODUCEN LAS VERRUGAS PLANTARES?
Esta lesión se produce por un virus, el papiloma humano (VPH) por lo que son muy contagiosas. Debido a las condiciones que suelen darse en la planta de los pies (humedad, andar descalzos por baños públicos…) se producen las condiciones ideales para que el virus se quede y se reproduzca en nuestros pies infectando las células de la piel y generando la verruga.
En torno al 10% de la población sufre estas verrugas que parecen tener cierta predisposición por niños y adolescentes ya que parecen tener un sistema defensivo mas inmaduro y cierta predisposición a andar descalzos. Personas con muchos estrés o con enfermedades que hagan tener las defensas bajas también sufren más esta infección.
Aunque es en la planta del pie donde se localizan con más frecuencia, no es exclusivo ya que debido a su alto poder contagioso pueden desarrollarse en otras partes del cuerpo.
¿QUÉ SÍNTOMAS DAN LAS VERRUGAS PLANTARES?
Dentro de los posibles síntomas de una verruga plantar podemos encontrar: dolor, picazón, posibilidad de que sangre la lesión, que aparezca en forma de lesión única o agrupada. Su forma suele ser en forma de coliflor.
¿CÓMO SE DIAGNOSTICAN?
Para el diagnóstico suele ser suficiente un buen examen clínico donde hay que tener en mente como diagnósticos diferenciales: callos, cicatrices, granulomas por cuerpos extraños…
Hay varios hallazgos que suelen ser típicos de los papilomas:
– al raspar una verruga plantar con el bisturí, se observan unos puntos de color marrón negruzco sangrantes
– los papilomas duelen al pellizcarlos, más que si los presionáramos con el dedo.
¿CÓMO PREVENIR EL CONTAGIO CON EL VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO?
Como suele decirse, es mejor prevenir que curar, así que la clave está en seguir una serie de consejos. Una de las claves será la de usar chanclas en sitios públicos como gimnasios, piscinas, vestuarios…También se aconseja no intercambiar zapatos (como puede ocurrir en las boleras). Mantener una buena higiene y unos pies secos han demostrado ser un buen remedio para prevenir.
En caso de tener una verruga plantar no debes andar descalzo en casa ya que tienen un alto poder de contagio; se recomienda cubrir la verruga para evitar contagios.
Y si tocas una verruga al intentar curarla, tienes que lavarte muy bien las manos para evitar que la infección se propague.
¿CÓMO SE TRATA EL PAPILOMA PLANTAR?
Al ser una infección vírica (como lo es también un resfriado) suelen curar solas pero pueden prolongarse mucho en el tiempo y llegar a durar meses e incluso años, con el riesgo que conlleva una posible reinfección o contagio.
La finalidad del tratamiento será eliminar las células infectadas. Para ello existen en el mercado una serie de productos como sustancias ácidas queratolíticas (la vaselina salicilítica es un ejemplo) o la crioterapia (usar nitrógeno líquido para quemar mediante el frío la lesión). Suele ser beneficioso acudir a un profesional para que retire con un bisturí la capa más externa de la piel afectada.
Otra opción sería la bleomicina que es un antibiótico que se inyecta dentro de la lesión. Es un tratamiento caro y agresivo y está contraindicado en niños, embarazadas, mujeres en edad fértil o personas con problemas circulatorios, renales, hepáticos o cardiacos.
Tenemos que tener mucho cuidado al usar estos productos y debemos de seguir las indicaciones de un profesional ya que al ser compuestos ácidos pueden dañar la piel sana si entran en contacto con ella, por lo que una buena opción defensiva de barrera podría ser untar un poco de vaselina alrededor de la piel sana para evitar que entre en contacto el fármaco con dichas células que están sanas.
Existen otras opciones en los casos en los que no se consiga mejoría como el empleo de láser de CO2, aunque no se aconseja de entrada ya que precisa anestesia local y en ocasiones deja una cicatriz dolorosa.
Pese a los tratamientos, las verrugas suelen tardar en desaparecer casi un mes y por su alto poder contagioso, es frecuente también que vuelvan a reaparecer
Así que el mejor consejo este verano para evitar el contagio con este virus es extremar el cuidado sobre todo en baños, piscinas y duchas públicas. Usar chanclas y tener los pies secos son claves para pasar un verano saludable.
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BIBLIOGRAFÍA:
Kwok C, Gibbs S, Bennett C, Holland R, Abbott R. Tratamientos locales para las verrugas cutáneas. Cochrane Database of Systematic Reviews 2014 Issue 2. Art. No.: CD001781. DOI: 10.1002/14651858.CD001781
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