Que es la nomofobia

Categoría: Enfermedades

Escrito el día 13-septiembre-2016 por Juan Toral

¿Te aterra la idea de salir de casa sin tu teléfono móvil? ¿Tienes la necesidad de sentir entre tus manos como desbloqueas la pantalla para estar conectado al mundo de la tecnología? En la actualidad no concebimos la vida sin este tipo de conexiones pero existen situaciones donde esto se convierte en una necesidad real y no tener nuestro Smartphone en nuestro poder puede desencadenar una enfermedad novedosa, la nomofobia.

La nomofobia se define como el miedo irracional a estar sin teléfono móvil. El término proviene del anglicismo “nomophobia” (“no-mobile-phone-phobia”). El grado de dependencia que estamos desarrollando con nuestros dispositivos está  generando una infundada sensación de incomunicación cuando nos dejamos el teléfono en casa o nos quedamos sin cobertura o batería.

Quizás puedas creer que es algo exagerado pero según estudios se ha visto que el 53% de los usuarios de teléfonos móviles desarrolla esta fobia (58% de los hombres frente al 48% de las mujeres)

Las personas que sufren este trastorno cuando se quedan sin sus teléfonos comienzan a presentar ansiedad, taquicardias, pensamientos obsesivos, dolor de cabeza y dolor de estómago.

Se ha desarrollado un perfil típico de la persona con nomofobia que suelen ser inseguras y tener una autoestima baja. También parece que existe mayor tendencia entre la franja de edad de la adolescencia donde las necesidades de comunicación y la autoestima están más debilitadas.

En nuestro día a día podemos estar presentando signos de que estamos desarrollando esta adicción. Si te quedas sin batería y estás deseado enchufar el cargador para saber si te han enviado algo, si vas camino al trabajo y en mitad del trayecto te das cuenta de que te has dejado el teléfono y te replanteas volver a recogerlo, si miras una y otra vez la pantalla del teléfono cuando estamos en una zona sin cobertura para saber si de nuevo estamos disponibles, son ejemplos de que podemos tener un problema.

Puede parecer una broma pero un estudio británico demostró que el nivel de ansiedad en las personas con nomofobia era similar al que sufría una persona en los días previos a su boda.

Según datos, cada persona consulta su Smarphone una media de 34 veces al día, una cifra muy significativa del grado de dependencia que hemos generado con nuestros terminales, todo un vínculo afectivo artificial.

Las nuevas tecnologías están bien siempre y cuando no nos dominen. Quizás sea la hora de replantearnos nuestra adicción. Si te has sentido identificado con algo de lo que hemos mentado en esta entrada, quizás sea el momento de hacer cambios. De salir a la calle y retar a tu teléfono; de ir a cenar y disfrutar de la compañía que tienes enfrente en vez de tener la atención en las notificaciones de nuestra pantalla.

Es por eso que termino esta entrada con algunos consejos que nos pueden resultar útiles para disminuir nuestro grado de adicción.

Si tienes autocontrol, deberás desprenderte del móvil de manera gradual; si no te ves capaz de controlarte, la terapia será de choque y tendrás que eliminar de raíz el móvil.

El primer paso a trabajar será el de afrontar de forma aislada las sensaciones negativas derivadas de este síndrome, como pueden ser las crisis de pánico.

Una posible planificación para afrontar la nomofobia podría ser:

1)   Apaga el móvil durante la noche

2)   Intenta dejar el teléfono en otra habitación cuando estés en casa y alejarlo de esa manera de ti

3)   Comenzar a hacer breves salidas sin el móvil. Por ejemplo salir a hacer la compra cerca de casa

4)   Prueba con eliminar las aplicaciones que te permitan conectarte a Internet. De esta manera reducirás la utilización que le damos al teléfono al no recibir notificaciones por lo que el teléfono serviría para recibir o enviar mensajes de texto o hacer/recibir llamadas

Si te es imposible conseguir desengancharte y te supone un problema es recomendable que acude a una consulta de Psicología donde seguro podrán ayudarte; también hay opciones virtuales en la e-Psicología

Debemos de empezar a evitar esta adicción digital ya en nuestros niños nativos de estas tecnologías. Se recomienda a los padres evitar que los hijos tengan conexión a la red desde su habitación y establecer unos horarios para un uso correcto de las tecnologías.
Hay que separar momentos y poner unos límites.

Tenemos que elegir si queremos beneficiarnos de las nuevas tecnologías o si por el contrario nos sometemos a ellas. Espero que a partir de ahora, al menos reflexiones sobre el tema. Tu pulgar y las personas que están a tu alrededor te lo agradecerán

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