Escrito el día 25 mayo, 2015 por Juan Toral
Con la llegada del verano, la presencia de enfermedades varían. Atrás parecen quedar los catarros, la congestión nasal y los procesos febriles que tan duros y largos hacen el invierno. Con el buen tiempo, patologías como la diarrea hacen acto de presencia y se convierten en protagonistas.