Categoría: Enfermedades
Escrito el día 06-marzo-2017 por Juan Toral
Corría el minuto 84 en el estadio de Riazor cuando Fernando Torres, uno de los héroes del fútbol español que con su gol en el Prater de Viena en la Final de la Eurocopa frente a Alemania contribuyó a cambiar la historia reciente futbolística cayó desplomado tras un encontronazo en pleno lance del juego con un jugador del Deportivo de la Coruña. Su cuerpo inerte y la reacción de los jugadores que presenciaron el golpe hicieron temer lo peor.
Desgraciadamente, en ocasiones los campos de fútbol, tan llenos de energía y adrenalina se tiñen de luto y es que resulta difícil olvidar las inesperadas muertes de jugadores como Antonio Puerta, el húngaro Miklós Fehér o el camerunés Marck-Vivien Foé.
Pero por fortuna, el golpe quedó en un susto y tras unos minutos de incertidumbre, Fernando Torres salía en camilla del estadio rumbo al hospital donde permanecería en observación y se le realizarían pruebas médicas para descartar la gravedad del incidente que al final quedaría tan sólo en un susto.
Pero el caso Fernando Torres debe servirnos a todos y es que pese a que al final todo saliese bien, muchas cosas se hicieron mal. Cuanto menos resulta curioso que equipos con un presupuesto millonario reciban tan mala formación sanitaria en primeros auxilios. Y es que la atención inmediata que recibió sobre el terreno de juego el delantero rojiblanco dejó mucho que desear: ver cómo le metían las manos en la boca o cómo en el intento movilizaban con fuerza su cuello son errores que pudieron tener consecuencias muy graves.
Es curioso leer en la prensa frases como estas: “Vrsaljko y Gabi le salvan la vida a Fernando Torres: ambos jugadores reaccionaron a tiempo para evitar que Fernando Torres se atragantara con su propia lengua” (La Prensa Gráfica); “Fernando Torres tiene dos ángeles: Vrsaljko y Gabi: el lateral y el centrocampista rojiblanco actuaron con una rapidez clave para evitar que El Niño se tragase la lengua tras caer desplomado sobre el césped” (Punto Pelota); “La actuación de Gabi y Vrsaljko fue clave para que la vida de Fernando Torres no peligrara: Gabi se llevó un mordisco por evitar que se ahogase con la lengua” (Ecodiario).
¿Qué se hizo mal en la atención a Fernando Torres?
1. Me consta que en las Redes Sociales se ha iniciado una campaña para concienciar a la población y es que pese a que en muchas ocasiones hayas escuchado lo contrario, la realidad es que es imposible tragarnos la lengua. Repito, la lengua no se puede tragar, es imposible ya que la lengua está pegada a la boca. Lo que puede pasar es que en estados de inconsciencia, la lengua se quede floja y caiga hacia atrás y tapone el paso del aire.
2. No hagas fuerzas para intentar abrir la boca: al intentar esto lo único que podemos hacer es romperle un diente a la persona, hacerle una herida o poner nuestros dedos en peligro ya que la persona inconsciente con un golpe en la cabeza puede por ejemplo convulsionar, por lo que al intentar la temeridad de abrirle la boca para “sacarle” la lengua, estamos poniendo en riesgo a la persona pero también estamos poniendo en juego la integridad de nuestra mano.
3. No hay que meter la mano en la boca de una persona inconsciente. La lengua en estos casos puede estar flácida e irse hacia atrás y taponar el paso del aire, pero es que si metemos nuestra mano o nuestros dedos lo único que hacemos es que la vía aérea encuentre más impedimentos para el paso del aire.
4. No hay que mover el cuello en el caso de que se sospeche una lesión cervical o un traumatismo de alto impacto. No se puede mover el cuello hasta que no tengamos claro que no hay lesiones cervicales, porque podemos seccionar la médula y dejar parapléjico a la persona. Antes de movilizar el cuello, tenemos que asegurarnos de que la persona moviliza los brazos, las piernas y que no ha perdido sensibilidad. Si finalmente hay que mover a la persona, tenemos que movilizar el cuello siguiendo una serie de pautas: tendríamos que hacerlo como un bloque, con alguien en todo momento sujetando la cabeza y manteniendo el cuello y la columna alineados.
5. Si dejamos a la persona tumbada boca arriba, por la propia inercia y la gravedad, la lengua flácida tienda a irse hacia atrás. La persona no se tragará la lengua pero ésta sí taponará el paso de aire por las vías respiratorias. Lo ideal será poner a la persona en posición lateral de seguridad.
¿Qué debemos hacer ante un caso como el de Fernando Torres?
1. Lo primero será intentar mantener la calma y para ello es clave que recibamos formación sanitaria en primeros auxilios. Así que tanto las federaciones como los clubes deportivos deberían ocuparse de darle asesoramiento médico periódico a las y los deportistas que pueden encontrarse ante situaciones tan desagradables como un traumatismo o un estado de inconsciencia.
2. Pide ayuda a un profesional sanitario de manera inmediata. Llama a la ambulancia, pide ayuda, pregunta si hay algún/a médico o enfermero/a cerca.
3. Manteniendo la calma, es esencial tomarnos unos segundos y acercarnos a la persona afectada y ver cómo está. Para ello es clave poner nuestros cinco sentidos, tumbarnos y poner nuestra cabeza sobre su nariz y mirarle el pecho para de esta sencilla manera comprobar cómo está. Para ello, VEMOS, OIMOS y SENTIMOS. Lo primero en estos casos es comprobar el estado de la vía aérea y para ello veremos y sentiremos si respira a través del posible ruido que emita o del movimiento de su caja torácica que se moverá o no si respira o no.
4. Tras comprobar si respira o no hay dos opciones:
a. Si respira: lo ideal será colocar al paciente en posición lateral de seguridad. En esta postura, además de que el paciente no se podrá tragar un posible vómito, hará que la lengua caiga hacia delante. Cuando vengan los servicios sanitarios lo siguiente será poner una cánula de Guedel y un collarín cervical.
(en los próximos días haré un post sobre la posición lateral de seguridad, pero mientras puedes ver cómo se hace pinchando en el siguiente link)
b. Si no respira: debemos intentar solucionar posibles problemas “locales” que obstruyan la vía aérea. Para ello lo recomendable es hacer la maniobra frente-mentón que hará que la lengua se alineé mejor y de esa manera se resuelva el paso del aire.
(puedes ver cómo se hace la maniobra pinchando en el siguiente link)
c. Si pese a todo sigue sin respirar la persona seguramente entre en una parada cardiorespiratoria por lo que el siguiente paso sería iniciar una reanimación cardiopulmonar básica (30 comprensiones torácicas, 2 ventilaciones)
5. En caso de dudas no hay que moverle el cuello, mejor esperar a que vengan los servicios sanitarios y le pongan un collarín y lo exploren y movilicen de manera correcta ya que si movemos un cuello con una lesión cervical-medular podemos empeorarlo todo. En caso de necesitar moverlo, tendríamos que hacerlo como un bloque, con alguien en todo momento sujetando la cabeza y manteniendo el cuello y la columna alineados.
Afortunadamente Fernando Torres se encuentra bien pero desafortunadamente, desde los medios de comunicación se ha perdido una oportunidad de oro para informar a la población y en vez de nombrar a Gabi o Vrsaljko como héroes, podían haber aprovechado e indicar a los telespectadores, oyentes y lectores la forma correcta en la que hay que actuar en situaciones como la vivida hace unos días en Riazor. Y es que la información es la madre de todas las batallas.
Posdata: ahora que me he mudado a Madrid me ofrezco a dar nociones básicas en primeros auxilios a Federaciones, Clubes, equipos o sociedades deportivas para evitar actuar de manera equivocada. Mi mail está abierto contacto@juantoral.comY es que compartir salud es regalar vida.
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